Si tenemos que hablar de bodas bonitas que tuve durante el 2022, no puede faltar la boda de Celia y Carlos. Mientras se acercaba la fecha me comentaban todos los detalles que estaban preparando para el gran día y yo me moría de ganas de que llegara.
Pronto llegó el 10 de septiembre. Me desplacé hasta Hontecillas, un pueblo muy pequeñito de Cuenca. En una finca particular habían organizado todo el evento. Un pinar con una luz increíble, unas pacas de paja colocadas en modo asientos y dos amigas encargadas de organizar a todos los invitados. Sin dejar de nombrar a los dos maestros de ceremonia, también amigos de la pareja.
Fue una ceremonia preciosa, llena de emociones, y justo acabó al atardecer. Aprovechamos esos últimos quince minutos de sol para realizar la sesión de pareja y conseguimos unas fotografías maravillosas.
El resto del día fue también súper divertido: una cena informal, música en directo para comenzar la fiesta, algún monólogo e, incluso, DJ en la zona de la piscina. Sin duda, una boda que jamás olvidarán sus invitados y, estoy segura, de que yo tampoco.