Una soleada tarde de finales de noviembre esta pareja decidió darse el sí, quiero. Miedo de que hiciese frío (lo hizo), de que lloviese, de que estuviese nublado, de que oscureciese muy pronto en invierno… pero todo salió increíble. Por la mañana el sol alegró el día y los preparativos. Carlos se vistió junto a su familia en el Parador de Toledo, con unas vistas impresionantes a la ciudad. Julia en un hotel maravilloso, Hotel Palacio Buenavista, donde aprovechamos muchas de las estancias.
Los nervios cada vez eran mayores. Todos los invitados esperaron en la puerta del Ayuntamiento de Toledo a la llegada del novio. Con música en directo entraron a la sala capitular y dio comienzo a la ceremonia. Una ceremonia súper emotiva y personal donde leyeron amigos y familiares.
Aunque hizo mucho frío y la luz solar empezaba a escasear, después de la salida del Ayuntamiento, aprovechamos un buen rato para hacer el reportaje de ellos dos por la ciudad. Qué momentos tan bonitos. Después nos dirigimos al lugar del banquete, un sitio espectacular, Viñedos Cigarral de Santa María.
Una boda llena de amor con detalles navideños.
Ceremonia: Ayuntamiento de Toledo
Preparativos novio: Parador de Toledo
Preparativos novia: Hotel Palacio Buenavista
Banquete: Viñedos Cigarral de Santa María
Vestido novia: Pronovias
